Una experiencia ciclista total:
Completé el recorrido de la prueba larga y no puedo describirla de otra forma que no sea: perfecta. Fue un trazado que lo tuvo todo —pistas de grava, tramos asfaltados, senderos que parecían túneles de vegetación, zonas llanas y puertos exigentes— todo ello enmarcado en un entorno de belleza indescriptible. Una combinación ideal para una prueba de esta envergadura. Terminarla no fue solo una meta física, sino también un auténtico reto personal. Una experiencia ciclista extraordinaria que, sin duda, repetiré el próximo año.



















































